ESTILO FRANCÉS
Sillón de patas cruzadas (1600-50). Este tipo de sillas , con respaldo y asiento de cuero, originariamente fueron pensadas para ser plegables; las versiones posteriores se convirtieron en fijas, al incorporarles un respaldo rígido. Durante la Edad Media y el Renacimiento, las sillas de patas cruzadas fueron universales entoda Europa.
Sillón Luis XIII (1610-43). La profusión de torneados en espiral de las patas, brazos y montantes de este sillón es una de las características del estilo Luis XIII. Alrededor de esta época apareció la tapicería de cuero o tela. Las maderas oscuras se hicieron extremedamente populares.
Silla Luis XIV (1643-1715). El alto respaldo yel amplio asiento de esta silla están completamente tapizados, lo que les brinda mayor comodidad que en otros tiempos. El estilo Luis XIV o Barroco era la combinación de unas grandes proporciones con una decoración ornamentada, entre la que figura el chapeado, las lacas, la incrustación, las maderas doradas y los detalles escultóricos de latón y otros metales. Más o menos en esta época hizo su primera aparición el sofá y el canapé. A partir de mediados del siglo XVI y hasta el siglo XX, la moda francesa dominó los gustos internacionales.
Sillón Luis XV (1715-75). El estilo Luis XV o Rococó vino a ser esencialmente una estilización del Barroco. Hacía hincapié en las formas delicadas, simplificadas, curvas, con pequeños adornos. Tanto las formas como las partes estructurales parecían concebidas para penetrarse suavemente. El Rococó incorporó la asimetría en las telas y alcanzó el equilibrio a través de medios más sutiles que los utilizados hasta entonces. Las maderas oscuras, que habían estado en boga hasta aquel momento, fueron sustituidas en parte por maderas claras, como el palo de rosa y las de árboles frutales. En las telas predominaron igualmente los colores claros.
Silla Luis XVI (1774-92). El mobiliario Luis XVI o Neoclásico se caracteriza por la simetría estricta y la clara separación de las diferentes partes. Aparece una acentuación de las líneas rectas, y los respaldos de los asientos adoptan forma de medallón, rectangular o de escudo. La tapicería era simple, de colores claros, a menudo con rayas de satén.
Sillón Directorio (1793-1802). El estilo Directorio, cuyo nombre proviene del grupo de hombres que gobernaron Francia entre la Revolución y la asunción del poder por parte de Napoleón, refleja la austeridad de aquellos tiempos. Era, en esencia, una extraodinaria simplificación del estilo Luis XVI, con unos pocos adornos metálicos o de taracea. Los brazos y patas de este sillón describen una suave curva y el asiento está simplemente tapizado de cuero. Prosiguiendo la tendencia neoclásica, muestra la influencia del estilo «etrusco».
Sillón Imperio ( 1804-15). La expedición de Napoleón a Egipto y su adopción de los motivos romanos generarón una creciente sensibilidad frente a la correción atqueológica. Las maderas oscuras siguieron gozando del favor del público, así como los colores fuertes y contrastados en la tapicería. Los sillones combinaban las curvas suaves con las líneas rectas y poderosas y con las superficies planas, las más de las veces a expensas de la comodidad. Los adornos y soportes solían adoptar la forma de motivos antiguos, por ejemplo, cisnes.
Sillón Segundo Imperio (1848-70). Durante el Segundo Imperio revivieron muchos viejos estilos entre ellos los de Luis XIV y Luis XV. Esta silla, construida alrededor de 1860, es un ejemplo de la tapicería extremadamente acolchada que fue popular en aquella época. Aparecieron también muchos tipos diferentes de sofás de dos o tres plazas. Al aumentar la mecanización, iniciada durante el Primer Imperio, se produjo una merma en la calidad del mobiliario.
Sillón Hécto Guimard (1899 aprox.). Guimard fue el decorador más destacado del estiloModernista (1890-1905), reacción frente a la creciente vulgarización del diseño. Ese sillón, que no es sino parte de un canapé, refleja las líneas ondulantes y sinuosas, interrumpidas por nudos bulbosos, propias de las formas de las plantas. Los motivos eran abstractos, pero no geométricos, y los tonos suaves y pastel eran los preferidos.