GUÍA SOBRE MADERAS
El objetivo del proceso de acabado consiste en hacer destacar lo mejor de la madera, mejorando el aspecto de la veta y el color, al mismo tiempo que se protege su superficie. Por tanto, es de vital importancia comprender la madera y aprender a identificar las especies más comunes. Así se podrá aplicar el acabado más adecuado a cualquier tipo de madera en particular.
La madera se divide, generalmente, en dos grupos, maderas duras y maderas blandas. Esta clasificación se ha efectuado en base a principios puramente botánicos. Las maderas blandas son de hoja estrecha, mientras que las duras poseen unas hojas anchas. Existe, asimismo, una diferencia estructural entre ambos grupos. Desde el punto de vista del carpintero, las maderas duras no son solo más duras sino, también, más densas que las blandas aunque hay excepciones.
Además de las diferencias entre las maderas blandas y duras y entre durámenes y alburos, la madera presenta una apmlia variedad en términos de color, textura, veta y patrón, cada especie posee sus propias características y usos en particular.
Hoy en día existe la cada vez mayor creencia de que no se puede emplear la madera al ritmo que lo estamos haciendo sin causar daños irreperables a los bosques tropicales y producir consecuencuias muy graves al medio ambiente. Desafortunadamente, las maderas duras de alto precio, tradicionalmente las más apreciadas para trabajos finos de ebanistería, son las que se encuentran en peligro de extinción. Sin embargo, mediante el empleo del acabado aporpiado resulta posible mejorar el aspecto de las maderas que no están amenazadas y utilizarlas en lugar de las maderas exóticas en peligro.
En los siguientes blogs se describen con gran detalle algunas de las maderas que gozan de mayor popularidad entre los artesanos del acabado. Se incluyen sugerencias acerca de cómo acabar las maderas para que parezcan exóticas, de modo que el lector sea capaz de evitar el empleo de especies de maderas que se encuentran en vías de extinción.
